La película Long Shot es un brillante y fascinante examen del caso de Juan Catalán, acusado injustamente de asesinato. El documental sigue a Juan y su abogado luchando por la justicia, y muestra cómo un giro aleatorio del destino llevaría a su exoneración.
El director Jacob LaMendola adopta un enfoque interesante, atractivo y visualmente agradable de esta historia real. La película no necesita una cinematografía sofisticada porque es tan cautivadora que incluso aquellos que no suelen disfrutar de los documentos quedarán enganchados. Con un tiempo de ejecución de solo 40 minutos, lo que lo convierte en una excelente visualización con tiempo limitado o para quienes están en movimiento.
El crimen en sí fue cruel, pero sin complicaciones. Martha Puebla fue asesinada a tiros en la puerta de su casa en Sun Valley, California en 2004. Un testigo proporcionó a la policía una descripción del agresor. Los detectives que trabajaron en el caso afirmaron que coincidía con Juan Catalan. Armada con nada más que una descripción de un testigo y un motivo intrincado, la policía se dispuso a atrapar a su hombre.
El caso depende de que Juan demuestre su asistencia a un juego de beisbol. A pesar de que su familia y novia corroboraron su historia, la policía no aceptará su versión de los hechos. Necesitará encontrar un testigo independiente para colocarlo en el estadio. A su abogado, Todd Melkin, se le ocurre la inspirada idea de combinar las imágenes de CCTV y la transmisión de deportes de ESPN para encontrar a Juan en el estadio.
Es una posibilidad remota, pero podría salvarle la vida a Juan. Después de días de leer videos, su abogado ve a Juan entre la multitud de 56,000 personas. Desafortunadamente, el metraje es demasiado granulado para identificar positivamente a su cliente. Cuando todo parece perdido, la salvación proviene de una fuente inesperada.
Long Shot es un documental reconfortante y reconfortante. Sin embargo, plantea serias dudas sobre la integridad de la policía de Los Ángeles y los fiscales estatales. Si no fuera por un giro aleatorio del destino, Juan Catalán ahora estaría sentado en el corredor de la muerte esperando su ejecución. Esto es una historia asombrosa eso te dejará cuestionando el sistema de justicia penal.